Se une a iluminación, textil y descanso y asegura que la medida reduciría los 4.000 millones en que cifra la economía sumergida en el sector.
El presidente de Federmueble, José Blasco, en Valencia. M. A. Polo.La industria del mueble espera que el nuevo Gobierno de Mariano Rajoy haga realidad dos viejas aspiraciones fiscales que las empresas vienen reclamando desde que se inició la crisis: la aplicación de un IVA superrreducido por el que esta tasa pase del 18% actual al 4% y que la compra de mobiliario pueda desgravar en el IRPF como inversión en vivienda habitual. La principal novedad en esta ocasión es que para reclamar estas rebajas fiscales el mueble y otros sectores relacionados con el hábitat se ofrecen para combatir el fraude fiscal y la economía sumergida. “Con estas medidas conseguimos que el que vaya a comprar un mueble le interese más que le hagan una factura”, asegura José Blasco, presidente de la patronal Federmueble. Según las estimaciones de la federación estatal, el fraude en su negocio supone alrededor de 4.000 millones de euros, un 30% del total en España. “Con esta medida el Estado no sólo obtendría los impuestos que ahora no ingresa, sino que se aumentaría más por el efecto sobre el consumo”, señala Blasco. Federmueble ha impulsado el Foro Empresarial del Hábitat junto con asociaciones vinculadas a productos como el textil hogar, la iluminación o la cocina como un órgano de reflexión de grandes empresas y lobby a la vez para llevar sus peticiones al Ejecutivo. El presidente de Federmueble asegura que están dispuestos “a luchar con el Gobierno contra el fraude fiscal, porque además supone una competencia desleal”. Eso sí, “nosotros no somos la policía y no vamos a denunciar nunca a ningún empresario, lo que sí denunciaremos es a las administraciones si no cumplen con su función”. Para Blasco, desde la perspectiva de un sector que ha visto cómo con la crisis han desaparecido el 42% de sus empresas, a prioridad ahora debe ser que las empresas puedan mantener su actividad y su empleo. “La reforma laboral es positiva, pero si no hay consumo no se van a crear puestos de trabajo”. El deterioro de la financiación a las pymes y los cierres han hecho que los fabricantes “empiecen a tener problemas para encontrar proveedores”. Además de buscar la reactivación del consumo en España, la otra apuesta de Federmueble es la internacionalización, y aunque reconoce que el pequeño tamaño tradicional de las empresas de mueble supone una desventaja a la internacionalización, también considera que hay alternativas. “Si algo se tiene que aprender de esta crisis es que no se puede sobrevivir solo, que hay que buscar alianzas”. Modelo Ikea El presidente de Federmueble tampoco considera que la extensión de fórmulas de low cost y del modelo Ikea hayan dañado a los fabricantes españoles. “Ikea es un modelo de comercio y por ello no nos afecta, lo único sí que sería deseable que comprase más mueble español y estamos negociando con ellos para que sea posible”. Fuente : www.expansion.com